Con la promesa de mantener abierta la discusión, el kirchnerismo logró quórum y busca avalar las retenciones

. viernes, 4 de julio de 2008
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El kirchnerismo dio el primer paso de una jornada agitada en la Cámara de Diputados: consiguió el quórum para tratar el proyecto oficial –con dictamen de mayoría aprobado ayer en comisión- sobre las retenciones móviles. Ahora, en una sesión que se demoró tres horas, busca darle media sanción. Para eso, apuesta a hacer pesar en el debate las nuevas compensaciones para los pequeños productores y la promesa de no cerrar el debate en particular a eventuales retoques.

Para ratificar el esquema de retenciones móviles impuesto el 11 de marzo, los kirchneristas necesitan mantener a sus aliados de la Concertación y al sector rebelde de las filas propias, encabezado por el ex gobernador bonaerense Felipe Solá, quien ayer presentó un proyecto alternativo al oficial que baja el nivel de las alícuotas.

Precisamente, el escollo más fuerte que enfrenta el oficialismo es que de sus 128 legisladores, hay 15 que finalmente se sumaron al dictamen de minoría de Solá . Esa iniciativa propone topes de 41,37% para las retenciones de soja, de 30,5% para las de maíz; de 37,3% para las de girasol y de 30,75% para las de trigo.

Por su parte, el titular del bloque de la Concertación Plural, el radical Daniel Katz, afirmó que "no queremos que el gobierno salga de rodillas", pero agregó que tampoco querían que "el campo salga mal".

La sesión estaba pautada originalmente para las 16, pero las negociaciones de última hora generaron una larga demora, hasta cerca de las 19 . Al comienzo de la sesión, antes de que el presidente del cuerpo, Eduardo Fellner, le diera la palabra al titular de la comisión de Agricultura, Alberto Cantero, se escucharon aplausos del oficialismo por haber alcanzado el quórum. Y silbidos por una bandera que miembros de la agrupación Pampa Sur – de la peronista santafesina María del Carmen Alarcón- colgaron durante algunos minutos de uno de los palcos.

Hasta ahora, en los discursos no hubo sorpresas. El diputado por la Coalición Cívica de origen radical Francisco Ferro anticipó que su bancada va a votar contra la resolución 125. Lo mismo hizo el diputado por la UCR de Santa Fe Pedro Morini, en nombre de su bloque.

Sin embargo, una línea de lo que podría verse en la próxima etapa de la discusión fue esbozada por la diputada del radicalismo k por Mendoza, Laura Montero, una legisladora cercana al vicepresidente Julio Cobos que afirmó esta noche que "no vamos a votar este dictamen de mayoría tal cual está".

Montero reclamó que la Cámara Baja apruebe una "modificación" al nivel de retenciones móviles y al sistema de "reintegros" para "garantizar rentabilidad necesaria para evitar la exclusión de los pequeños productores del sistema agropecuario".

Si es que finalmente hay retoques en la resolución 125, eso podría modificar el mapa de los 30 legisladores en rebeldía y también de los nueve que conforman el ARI disidente que aunque elogiaron algunas decisiones oficiales de las últimas horas, ayer adelantaron que no acompañarán al Gobierno. El legislador Carlos Raimundi confirmó esta noche, en su intervención, esta postura.

El proyecto oficial con dictamen de mayoría finalmente contempló una extensión de los reintegros a pequeños productores que estaban incluidos en el texto que envió el Poder Ejecutivo al Congreso. El beneficio cubría originalmente a productores de hasta 500 toneladas de soja o girasol anuales y ahora abarcará hasta los de 750 toneladas. El plazo de devolución se acortará de 60 a 30 días. También se facilitarán las condiciones de inscripción. Ese esquema será transitorio, ya que vencerá el 31 de octubre.

Del lado opositor, la tesitura está definida. En la maratónica reunión de ayer en la Comisión de Agricultura y Presupuesto volvieron a ratificar el pedido para que la resolución 125 sea suspendida por 150 días, y retrotraer la situación al 11 de marzo, para discutir una política agropecuaria en su conjunto.

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